Negros pensamientos

Autor desconocido

Son negros pensamientos.

Es pleno diciembre y las cosas no marchan bien. Decido entrar a un bar y dejar correr la pluma hasta aclararme un poco, no mucho, no sería conveniente. Busco el más sórdido y oscuro, donde la mujer regordeta extiende una mano de uñas mal pintadas, rojas y derruidas. No quiero caer de golpe en la realidad, trataré de soñar lo suficiente, hago una imagen mental de Gato Pardo (http://elfunestotejado.blogspot.com/) nadando de espaldas en un mar dorado de ron, bracea lentamente y se abandona al placer efímero… ¡qué importa mientras sea placentero! Todo puede derivar de las ausencias que a mi mesa, vacía, se van sentando una a una; brindan con la seriedad que dan las presencias etéreas. Callados, entre la pena y la preocupación ¿Por mí?

Quedo estático, congelado. Los focos y adornos de éstas fechas se me antojan demoniacos, burlescos, recuerdos centelleantes de otra de mis vidas. No sé bien a bien dónde estoy colocado. La primera cerveza se agota con celeridad, mis músculos se aflojan, el frío se va.

Las ausencias se vuelven claras, sosegadas, menos hirientes. Me miran desde las cuencas vacías, las de adorarme, las de las épocas seguras y tranquilas. Pienso y re pienso en esta nueva copa de licor. La celeridad con que bebo no es un buen indicio para el veintidós de diciembre. Voy dejando escapar una letra tras otra, en el vacío de la hoja blanca, preámbulo de no sé qué, en el vacío inmundo de esta media tarde sola, solo. Puta madre. No hay tiempo de correcciones en el decir ni para buscar buenas formas o estructuras en el bastidor de frases sueltas. Voy brincando, desesperado, en la hosquedad, en la furia, en la tristeza; dentro de la ciudad que se come todo, en la que voy encontrando menos que más, donde coloco mis descuidos. He descubierto que hasta la mujer que duerme conmigo espera por mis días bajos para asestarme el golpe definitivo, ¿para qué?, ¿por qué? No quiero responder, de qué serviría.

Voy tratando de hacer alianzas, de construir, de ir juntando, de agregar, de sumar…

¿Cómo hago eso en tanto me voy despedazando?

Marváz